ACCIONES COMUNITARIAS

DIFUNDIENDO EL MENSAJE GLOBAL DE
EL CAMINO A LA FELICIDAD

Una red internacional de voluntarios y seguidores de El Camino a la Felicidad ahora se extiende a lo largo de 186 naciones.

En muchas ciudades, los voluntarios de El Camino a la Felicidad han implementado el precepto de “Protege y Mejora tu Medio Ambiente” mediante emprender esfuerzos de limpieza para quitar botellas, latas y basura de su vecindario.

Miles de escuelas han participado en certámenes de “Da un Buen Ejemplo”, en los cuales la juventud toma un papel activo a la hora de construir la responsabilidad, competencia y confianza. Una revisión independiente de los programas de El Camino a la Felicidad en las escuelas encontró que el 90% de los maestros participantes notó un cambio positivo en las actitudes de sus estudiantes.

LOS VOLUNTARIOS DE EL CAMINO A LA FELICIDAD han usado los FOLLETOS en ZONAS DE CRISIS para LLEVAR LA CALMA y AYUDAR A APACIGUAR LA VIOLENCIA.

El Camino a la Felicidad también se usa en campos deportivos y en gimnasios como una herramienta para promocionar la buena deportividad y el juego limpio. Mediante los programas de carácter educativo, los estudiantes atletas desarrollan valores de sentido común que pueden ayudarles a lograr altos niveles de desempeño tanto como individuos, como miembros de equipo.

Profesionales y propietarios de negocios han difundido El Camino a la Felicidad en sus comunidades patrocinando concursos y campañas dirigidas a hacer que las escuelas estén seguras y no hayan drogas.

Los preceptos de El Camino a la Felicidad se utilizan de formas ilimitadas. Como comunicó un abogado comunitario en Los Ángeles, el folleto es eficaz resolviendo los conflictos del día a día:

“Hemos tenido una muy buena respuesta de la gente de nuestra comunidad desde la distribución deEl Camino a la Felicidad. En nuestro proyecto en el edificio local, había muchos problemas entre inquilinos: disputas, falta de respeto y mucho crimen. El gerente del edificio repartió libros en la reunión mensual de inquilinos. Como resultado observó un cambio significativo y el índice de criminalidad descendió también. Esto fue por el libro”.

Los voluntarios de El Camino a la Felicidad, dedicados a mejorar los estándares morales y creando un impacto positivo en la comunidad, distribuyen folletos en todas partes.

Los voluntarios de El Camino a la Felicidad han usado los folletos en zonas de crisis para llevar la calma y ayudar a apaciguar la violencia. Para reducir la actividad de las pandillas, los voluntarios de El Camino a la Felicidad en Los Ángeles quitaron grafitis de 130 edificios mientras distribuían miles de ejemplares del folleto. En Irak, dos voluntarios entregaron seminarios a más de 2 500 personas y distribuyeron 30 000 ejemplares del folleto. En Israel, se impartieron 15 000 conferencias y talleres de El Camino a la Felicidad a los que asistieron unas 350 000 personas de todas las edades.

Se ha comprobado que El Camino a la Felicidad también es una herramienta eficaz para la prevención del crimen y la rehabilitación del criminal. Se ha usado de forma eficaz en instituciones penitenciarias, reformatorios juveniles y programas comunitarios de prevención del crimen. Es también el elemento central del Programa Criminon, una organización sin ánimo de lucro dedicada a la rehabilitación de delincuentes. El programa está funcionando en más de 1 500 prisiones a nivel mundial y ha dado servicio a unos 150 000 reclusos en 38 naciones.

El Programa de Criminon va directamente a la causa de la criminalidad restaurando la autoestima y equipando a los delincuentes con destrezas para la vida, devolviéndolos a la sociedad como miembros positivos y que contribuyen.

El Programa de Criminon se ofrece mediante dos modalidades de entrega: mediante cursos entregados directamente en el lugar y con cursos a distancia. Está disponible un Kit de Recursos para Restaurar el Autorespeto como un programa educativo para los directores de prisiones y reformatorios juveniles.

Los materiales, disponibles sin ningún coste, proporcionan las herramientas necesarias para ayudar a los delincuentes a recuperar su autoestima y alejarlos de una vida de crimen. Está disponible tanto en Criminon como en la Fundación de El Camino a la Felicidad.

Prisiones usando programas de reforma basados en El Camino a la Felicidad han informado de caídas enormes en tasas de reincidencia, incluso entre los delincuentes más empedernidos.

La información concerniente a todo el plan de estudios de reforma criminal de Criminon está disponible en www.criminon.org.